La importancia de las clases presenciales en el nivel universitario

En la era digital, donde la tecnología ha transformado la educación, las clases presenciales en el nivel universitario mantienen un valor insustituible. Aunque las plataformas virtuales ofrecen flexibilidad, la interacción cara a cara entre estudiantes y profesores fomenta un aprendizaje más profundo y significativo. 

Las clases presenciales crean un entorno dinámico donde el intercambio de ideas fluye de manera natural. En un aula, los estudiantes no solo absorben conocimientos teóricos, sino que también desarrollan habilidades sociales y emocionales clave, como el trabajo en equipo, la empatía y la comunicación efectiva. Estas competencias son esenciales para su futura inserción en el mercado laboral, donde la colaboración y la resolución de problemas en tiempo real son fundamentales. Además, la presencia física del profesor permite una retroalimentación inmediata, adaptada a las necesidades individuales, algo que las plataformas virtuales no siempre logran replicar con la misma eficacia. 

Otro aspecto crucial es el sentido de comunidad que se construye en el aula. La universidad no es solo un espacio para adquirir conocimientos, sino también para forjar redes de apoyo, amistades y conexiones profesionales. Las interacciones espontáneas, como debates en clase o charlas informales, enriquecen la experiencia educativa y contribuyen al crecimiento personal. Estas dinámicas son difíciles de replicar en entornos virtuales, donde la conexión humana puede sentirse fragmentada. 

Por otro lado, las clases presenciales promueven la disciplina y la responsabilidad. Asistir a un campus requiere compromiso, lo que ayuda a los estudiantes a desarrollar hábitos de organización y constancia. Además, el acceso a recursos físicos, como laboratorios, bibliotecas y espacios de estudio, potencia el aprendizaje práctico y experimental, especialmente en disciplinas como las ciencias o las artes. 

Si bien la educación en línea es una herramienta valiosa, las clases presenciales ofrecen una experiencia integral que combina aprendizaje académico, desarrollo personal y conexión humana. En un mundo cada vez más digital, el aula tradicional sigue siendo un pilar fundamental para formar profesionales competentes y ciudadanos comprometidos. 

Por: Mtra. Alba Patricia Domínguez Barret

Docente de Posgrados UDC